La incomparable chicha: Bebida sagrada de mesoamérica

Poco o mucho se sabe de esta bebida que hoy te presentamos. Sin embargo, su presencia en las costumbres y tradiciones de muchos países es indiscutible.


Dentro de la variedad de bebidas que ofrece la gastronomía guatemalteca, algunas son producto de la conquista española, otras de origen prehispánico con connotaciones sagradas como lo es la chicha, una bebida alcohólica fermentada preparada a base de maíz y muy consumida en Mesoamérica.

Como hemos indicado en varias ocasiones, Guatemala es una fusión de grandes culturas dando un resultado exquisito en cuanto a gastronomía se refiere. Las costumbres y tradiciones están muy enraizadas en los chapines por lo que hasta la fecha prevalecen platillos y bebidas milenarios prehispánicos más los que se fueron creando durante el Reino de Guatemala.

La chicha es una de las bebidas fermentadas guatemaltecas por excelencia. Por su naturaleza resulta muy afín al fresco de súchiles. De acuerdo con el investigador Luis Villar Anleu, el súchiles podría ser una base para la chicha, si se le agrega un puñado de semillas de anís y jocotes de chicha y se deja fermentar por 8 días más.
La palabra chicha es de origen incierto. Podría provenir del náhuatl chichiatl (agua fermentada), o del maya chiboca (mascar), pero según la Real Academia Española proviene de la voz aborigen de Panamá chichab (maíz). Sea cual sea su etimología, la chicha es una bebida alcohólica artesanal resultado de la fermentación del maíz junto con otros frutos y cereales como el nance, el tamarindo, el jengibre, la piña, la cebada, el anís y la panela. Originalmente la chicha era consumida solo en las ceremonias de ofrendas o en días festivos familiares ya que en la elaboración se involucraba a toda la familia, pero eran los niños y las mujeres los encargados de masticar los granos de maíz. Después de aproximadamente 15 días empieza a fermentar y continua por 10 días más, volviéndose una bebida alcohólica.

Las investigaciones realizadas por Villar Anleu relatan que la chicha fue satanizada durante la época colonial, prohibiendo su consumo en ceremonias. Uno de los más claros ejemplos del uso ceremonial de la chicha, se encuentran la aldea Lo de Bran del municipio de Mixco, en el departamento de Guatemala, durante las conmemoraciones del Jueves de la Ascensión de Nuestro Señor, durante el mes de mayo, cuarenta días después del domingo de resurrección. Narra Villar Anleu que en esta fecha la preparación y consumo de la chicha se articulan a un complejo ceremonial de varios días que incluye ritos católicos del caso, danzas tradicionales y otros actos de fe.

La composición actual de la chicha contiene ingredientes que se incorporaron durante la conquista española, difiere de la chicha prehispánica, la cual es más sencilla y de vegetales nativos. Cuenta un relato del Popol Wuj: Y llenos de alegría dijeron- Ahora vamos a fabricar nuestra chicha durante estos tres días. Pasados estos tres días beberemos por la construcción de nuestra casa, nosotros los cuatrocientos muchachos.

ODA A LA CHICHA

Porque borra la desdicha,
porque siembra la alegría,
porque aumenta la osadía,
por eso yo tomo chicha.

La chupilca con harina
y de trigo es el muday,
absorberé de un cuanto hay
mientras el codo se empina.

Tomo chicha en la mañana
y tomo chicha en la tarde,
tomo chicha de manzana
hasta que el hocico me arde.

Lo extranjero es de otro lao
a Chile le pongo ficha,
por eso yo tomo chicha
y no le hago al destilao.

Francisco Viveros
Santiago, de Chile.
Obtenido de: lairapopular.blogspot.com
Publicado por: vilumilla

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