¿Tránsito o Asunción? La fiesta de Chiquimula de la Sierra

Para muchos la diferencia entre Tránsito y Asunción es aún desconocida, pero para los chiquimultecos de la Sierra, estos términos encierran un gran significado.

Numerosas poblaciones en Guatemala fueron dedicadas a la Asunción de María, fiesta católica que se celebra el 15 de agosto, entre ellas en el antiguo pueblo de Chiquimula de la Sierra.

Según la doctrina católica, María madre de Jesús, era un ser muy especial y amada por su hijo. Pero, como todos los humanos, debía fallecer. Sin embargo, por ser extraordinaria, no debía sufrir la descomposición de su cuerpo, por lo que fue asunta o elevada al cielo por los ángeles después de quedar como en un sueño, por lo que a ese breve momento se le llama la Dormición o Tránsito, en el que pasó del mundo de los humanos al cielo. 

Como todas las festividades, la celebración empieza a las seis de la tarde del día 14, o vísperas. El momento del Tránsito debía celebrarse entre la noche y madrugada de ambos días. Así, la misa del día 15, sería ya la Asunción. Chiquimula era una población establecida hacia 1540 y al parecer, estaba dedicada a San Nicolás Obispo. Pero en 1600 la cofradía de la Asunción, integrada por españoles y mestizos, cobró mucha importancia, tanto social como económicamente. En 1627, esa cofradía contrató la construcción de un costoso retablo y ya contaban con una escultura de la Virgen. Fue en esa época que el nombre del pueblo cambió a Asunción de Chiquimula de la Sierra.  

En 1745, la fiesta empezaba el día 13, cuando se celebraba el Tránsito y terminaba el 18.  Fue en ese año que empezó a usarse el nombre de Tránsito para la festividad. Sin embargo, se continuó usando también el apelativo de Asunción. En 1765 el pueblo fue trasladado desde el lugar donde se encuentra la Iglesia Vieja al asentamiento actual, casi un kilómetro al occidente. 

El corregidor de la época trató de cambiar el nombre del pueblo a Santísima Trinidad, pero, al ser sustituido, se volvió a usar el nombre de Asunción y por lo tanto, la feria de la población seguía celebrándose en agosto. La fiesta incluía corridas de toros, para las que se instalaban barreras en la plaza central y los jinetes azuzaban toros como diversión.

También se acostumbraba tratar de montar a los vacunos. Además, se practicaba la jalada de patos, en las que se sacrificaban esas aves. Se instalaban puestos de ventas y comida en el resto de la plaza y había mucha animación, incluidos fuegos artificiales y música. 

Después de la Independencia, la población recibió el título de villa y más tarde, el de ciudad, pero conservó su fiesta tradicional. A finales del siglo XIX se participaba en el palo ensebado como entretenimiento, se montaban obras de teatro en el edificio estrenado en 1868 (donde ahora está el Salón de Obreros El Porvenir), había conciertos de banda marcial, danza de Moros y cristianos, exhibiciones cómicas en las que los payasos se introducían en túneles hechos bajo al pavimento de la plaza para salir bajo los toros y, como siempre, comidas tradicionales. 

En 1883 se hizo la exhibición de la luz eléctrica durante la feria.  En 1903 el gobierno decidió que era mejor trasladar la feria a Navidad, y en 1936 al Día de Reyes.  Sin embargo, la población seguía conmemorando el 15 de agosto. 

Fue a partir de 1945 que se estableció definitivamente la Feria del Tránsito que, como hace siglos, espera a los chiquimultecos y visitantes para dar el mejor rostro en la fiesta patronal.